Desgraciadamente, la consejería de educación ha hecho caso omiso a las reiteradas peticiones por parte de las asociaciones educativas y vecinales del barrio.
Este es un problema que se sabia que llegaría desde hace mucho tiempo, y que tenia fácil remedio, construir otro instituto. Se les ha comunicado por activa y pasiva, pero la política de oídos sordos a los vecinos y a sus asociaciones vecinales tiene sus consecuencias.
Llevamos años advirtiendo de que este momento llegaría, pero nos han escuchado y ahora admiten que tenemos un problema.
Como consecuencia, muchos de nuestros hijos tendrán que estudiar fuera del barrio al llegar al instituto.
Ahora ya no hay tiempo, y como mínimo tenemos problemas para tres años…. como mínimo.
Tenéis la información ampliada aquí.